Bolivia traslada la eliminatoria para la Copa del Mundo a mayor altitud, con la esperanza de mejorar su rendimiento
EL ALTO, Bolivia (AP) — Bolivia siempre ha sido un lugar difícil para jugar.
Ahora el desafío es aún mayor. Literalmente.
El equipo nacional de fútbol masculino espera que albergar las eliminatorias para la Copa del Mundo a una altitud más alta que nunca les ayude a mejorar en la clasificación sudamericana.
Los bolivianos suelen jugar en la capital, La Paz, a 3,640 metros sobre el nivel del mar, pero la CONMEBOL les ha permitido trasladar sus juegos a El Alto, la segunda ciudad más grande del país, a una altitud de 4,150 metros. Eso es tan alto como nueve edificios Empire State apilados uno encima del otro.
Con una victoria y cinco derrotas, Bolivia está en penúltimo lugar en la clasificación y necesita una victoria el jueves contra Venezuela, que está en quinto lugar y viene de una carrera hasta los cuartos de final en la Copa América.
El nuevo entrenador de Bolivia, Oscar Villegas, hará su debut después de reemplazar a Antonio Carlos Zago, quien fue despedido en julio después de una Copa sin victorias. Villegas espera aprovechar la mayor altitud eligiendo un equipo en el que el 80% de los jugadores estén acostumbrados al aire más delgado, incluidos seis del club Always Ready en El Alto y seis más del Bolívar en La Paz.
“El fútbol está hecho de detalles. No significa que con esto (cambiar de estadios) vamos a ganar”, dice Villegas, ex delantero de La Paz. “Estamos tratando de cuidar detalles que nos permitan ser más efectivos.
“En El Alto, vamos a intentar ser lo más intensos posible y hacerles saber que están en un terreno nuevo donde hemos sido imbatibles”, dijo Villegas, refiriéndose a los equipos locales que juegan allí en competiciones de clubes como la Copa Libertadores y la Sudamericana. “El aspecto psicológico y emocional también juega un papel, es algo que nos va a ayudar mucho.”
El Estadio Municipal de El Alto abrió en 2017 y es considerado una joya en las tierras altas bolivianas. En su césped verde, marcado en blanco, está la frase, “Juegas donde vives.”
Con forma ovalada y capacidad para 24,000 espectadores, el estadio de El Alto es más pequeño que el estadio Hernando Siles de La Paz, que tiene capacidad para 40,000 espectadores. Pero la altitud de El Alto es 560 metros más alta.
El presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Fernando Costa, dice que el estadio está siendo probado para ver cómo responden los jugadores, para determinar si El Alto puede convertirse en un lugar permanente para los partidos de local.
Los partidos de local de Venezuela son al nivel del mar, y no se ha quejado del cambio de sede, pero está tomando medidas.
En una lista preliminar de 47 jugadores, el entrenador de Venezuela, Fernando Batista, incluyó a algunos que están activos en ciudades donde el juego se juega a altitud, entre ellos el portero Alain Baroja del club boliviano Always Ready. Los venezolanos se están preparando sometiéndose a ejercicios de respiración con oxígeno y aclimatación en cámaras hiperbáricas.
No todos están de acuerdo en que el fútbol de primera clase deba jugarse a gran altitud.
Tite, el entrenador del club brasileño Flamengo, dice que es “difícil” jugar a gran altitud después de perder ante Bolívar 1-0 en La Paz hace dos semanas en los octavos de final de la Copa Libertadores.
En 2007, la FIFA criticó los partidos en la altura de La Paz y dictaminó que los partidos internacionales no podían jugarse por encima de los 2,750 metros. Sin embargo, al año siguiente, la FIFA retrocedió después de las objeciones de Bolivia, donde la mayoría de los estadios están por encima de esa altitud.
“El campo ha sido aprobado por CONMEBOL porque cumple con todos los requisitos que han solicitado”, dijo Edmundo Vargas, director de deportes municipal de El Alto, a The Associated Press.
Pero hay poca investigación sobre jugar al fútbol a más de 4,000 metros sobre el nivel del mar, como ocurrirá el jueves.
“Siempre recomendamos que cualquier atleta tenga una evaluación previa antes de venir a la altitud y un período de adaptación”, dijo Jesús Jiménez, investigador del Instituto Boliviano de Biología de Altitud.
Se mostró escéptico sobre las afirmaciones de que la gran altitud da a Bolivia una ventaja sobre otros equipos, señalando que “Bolivia ha perdido antes en su campo de casa.”
Bolivia no ha clasificado para la Copa del Mundo desde 1994.
